POEMA DEL
NECIO ANTE LA TUMBA DE
ALGUIEN
Rafael Alcides, tu memoria de futuro nos hace justicia
el hombre
-con vocación de
loco-
se raptó a sí
mismo
y encomendó sus
fieles diablos a la fosa común
mientras yo
-necia-
pretendía el
sol.
pero el hombre
extendió su camisa de fuerza
y no hay luz.
luego
erigió su
estatua en los caminos
en el cielo
en el paño de
lágrimas de los deudores
y fue a dormir
con la convicción de inventar el mundo.
La Habana, 1995